El técnico del Junior, César Farías, habló de todo. Como de costumbre se extendió en sus respuestas, pero explicó a fondo el trabajo que ha adelantado en las dos semanas que lleva al frente del equipo. Ya sufrió su primera derrota (2-0 ante el DIM por la Copa Colombia), pero está convencido de estar dándole las herramientas a sus dirigidos para salir del bache en que se encuentran.

El venezolano, quien tendrá su primer examen en casa el próximo lunes contra Águilas Doradas,  negó que haya prohibido la asistencia de la prensa a los entrenamientos y aseguró que respeta los protocolos del club respecto al trabajo de los periodistas.

También desmintió que les haya prohibido a los jugadores el uso de sus redes sociales y que no den entrevistas a la prensa.

Sobre un supuesto acto de indisciplina de un jugador del equipo, aclaró que este se produjo antes de su llegada al Junior. “Ningún jugador ha faltado a ningún entrenamiento no ha llegado en condiciones no correctas”, dijo Farías, quien habló con el jugador involucrado y este le explicó lo que había sucedido.

“Fue en un día que no estaba convocado a un partido, fue a una fiesta, pero en un día libre de él, como cualquier muchacho joven”.

Otro tema que tocó Farías fue el de la frustrada llegada de Faryd Mondragón como su asistente técnico.

“Queríamos traer a una persona que significa mucho para el fútbol colombiano y sudamericano, con una personalidad que podía ser influyente y que fuese positivo, sumando un aspecto que normalmente no se tiene en los clubes”.

Señaló que, con Junior, está haciendo una “pretemporada dentro de la temporada”, pero que esto ha sido culpa de la propia competencia, que no ha permitido que el equipo tenga una base de trabajo, como sí la tuvo con ‘Bolillo’ Gómez.

Sobre los trabajos a doble turno que ha implementado desde su llegada, dijo que lo ha hecho para aprovechar el tiempo tras los dos partidos de Liga que fueron aplazados (Pereira y Nacional).

“Necesitamos aprovechar este tiempo y sacar los resultados, porque este es un equipo ganador, pero sin trabajo no hay victorias”, dijo Farías, quien elogió al grupo de futbolistas que tiene Junior.

“Hemos coincidido con un grupo de seres humanos excepcional, que también necesita sus espacios, que necesita un regaño y una caricia. La vida es así”.

Bromeó con los periodistas diciendo que algunos hicieron apuestas de cuándo se van a pelear con él. “Creo que la van a perder porque eso no va a suceder”.

Uno de las principales tareas que tiene en Junior actualmente es construir una nueva defensa debido a la salida del club de Gabriel Fuentes y las lesiones de Rafael Pérez, Jermein Peña y Yairo Moreno.

Ha visto que en Junior hay una “banda de amigos”, con gente dispuesta, desde los más grandes (citó a Bacca, Didier y Marco Pérez) hasta los más pequeños.

“Nos gusta que el entrenamiento sea real, no que se vea bonito para la prensa. Que el grupo quede fatigado, cansado, que le duela todo para después poder disfrutar en el partido”.

Por esta razón ha elevado las cargas de trabajo del equipo con el fin de que pueda soportar la seguidilla de partidos que se le vienen.

“Cuando el equipo pueda soltar el trabajo que venimos haciendo vamos a poder conseguir los objetivos que queremos, que son clasificar, y ya dentro de la clasificación es una historia nueva. En esta instancia Junior se crece, pero queremos que los jugadores tengan respuesta para ello”.

Reconoció que los jugadores han tomado de la “mejor forma” los trabajos a doble turno, que se han realizado para potenciar la fuerza y los aspectos tácticos que él quiere.

“Que la gente sepa que aquí no hay vagos, que los vagos no pueden estar en esta institución, que aquí hay gente trabajadora, que ha tenido buenos y malos momentos y que estamos trabajando para volver a los buenos momentos y salir de ese bajón que tiene el equipo. Estamos para tratar de hacer crecer un equipo que tiene necesidad y que tiene todo para ser un equipo que pueda llegar a la final”, concluyó.