Junior de Barranquilla finalmente desembarcó en suelo 'currambero' para festejar con sus aficionados por breves minutos en la puerta del hotel Dann Carlton, al norte de la ciudad.

Al llegar a Barranquilla, el equipo abordó el bus para salir desde la pista del aeropuerto,  para garantizar el orden público ante la gran presencia de hinchas.

La caravana fue acompañada por hinchas que al pasar del bus del equipo se unian al festejo.

Sin embargo, no todo fue alegria en el recorrido, pues algunos desadaptados disfrazados de aficionados  quisieron entorpecer la celebración, por lo que que la Policía se vio obligada a intervenir para solventar la situación.

El primer integrante de la nómina en descender fue Alexis Mendoza en medio de los vítores de los hincas. Con él bajaba la Copa de mano de uno de los asistentes, lo cual desató el ánimo de los aficionados.

Uno a uno los jugadores descendieron pos las escaleras del automotor y recibieron los aplausos de sus hinchas, quienes además se tomaron fotos y les firmaron autógrafos a los seguidores.