Fácil. Así venció el colombiano Jhon Wilmer Martínez a Ajayi Jones, de Barbados, en el salón Jumbo del Country Club.

El local mostró categoría en su debut en los Juegos Centroamericanos y del Caribe. Superó a su rival de principio a fin.

El colombiano salió desde el inicio la pelea ante los movimientos defensivos de su contrincante, que atacaba muy poco.

La contienda fue subiendo la temperatura, pero ninguno de los dos podía conectar un golpe hasta que Martínez lo acorraló en una esquina y lo conectó en el rostro.

La avalancha de golpes de Jhon Wilmer siguió. Lo volvió a arrinconar y le propinó varias trompadas de seguido, al cuerpo y su cara.

Jones no reaccionaba y tambaleó en el ring, por lo que el juez tuvo que decretar el nocaut técnico.

El colombiano ganó con facilidad en el primer episodio, en la categoría de los 56 kilogramos.

"Bailó con la más fea"

La suerte diferente para el atlanticense Albeiro Paredes, quien cayó derrotado por decisión unánime ante el cubano Lazaro Álvarez.

El local salió sin complejos a conectar varios golpes su oponente, en el primer asalto.

Álvarez se defendía con criterio, mientras que el público alentaba al colombiano para que siguiera encima de su rival.

El primer episodio terminó parejos, con pocos golpes directos y certeros.

El segundo round fue más combativo. Lazaro empezó a mostrar sus credenciales ante el colombiano que fue perdiendo estabilidad.

Álvarez dominaba el encuentro y controlaba al local con movimientos rápidos. Además lo provocaba, situación que enfureció a Paredes, quien pudo conectar algunos golpes.

Al atlanticense le tocó bailar con la más fea. Lazaro es uno de los candidatos al oro Centroamericano y lo demostró en el cuadrilátero.

En el último asalto, revalidó su favoritismo y superó al local con varios golpes en su rostro.

Los jueces decretaron victoria para el cubano, quien es tres veces campeón mundial y olímpico, por decisión unánime.