La colombiana Mariana Duque-Mariño dijo hoy tras vencer a la alemana Sabine Lisicki por 1-6, 6-3 y 6-4 y alcanzar los cuartos de final del Abierto de Mallorca, sobre hierba, que en esta superficie siempre hay que hacer "cosas diferentes".

"Sabía que era un partido muy duro, para Sabine una de sus mejores superficies es la hierba y yo empecé muy nerviosa, con muchas dudas, mientras que ella le pegaba muy fuerte, y se me hacía muy difícil controlar la pelota, pero a medida que avanzó el juego comencé a hacerle daño con el mío", comentó la jugador de Bogotá.

Sabedora de que su revés cortado es muy efectivo, Mariana castigó con ese golpe a la jugadora alemana. "En esta superficie hace un montón de daño y lo utilizaré todo lo que pueda ahora", dijo.

"No es fácil, pero hay que tomárselo bien, de la mejor manera", señaló cuando se le preguntó si llegar a un torneo de hierba directamente desde Roland Garros es lo apropiado.

"Hay que estar preparada porque no siempre se juega bien en hierba y toca hacer cosas diferentes a las que haces con normalidad en otras superficies. Yo lo que intento es estar relajada en todo momento", señaló.

"Toca hacer lo que se te ocurra en ese momento. No da mucho tiempo para pensar y hay que entrenar mucho el principio de la jugada, y es en lo que estoy trabajando más", dijo sobre esta superficie.

"Hoy ganó un partido bueno, es una jugadora muy talentosa, saca muy bien y con buena derecha", añadió sobre su próxima rival en cuartos, la letona Anastasija Sevastova. "Intentare hacer mi juego y ganar", subrayó.

EFE