La organización de los JJOO de Tokio 2020 y un comité especial de trabajo señalaron hoy que preparan a contrarreloj la inclusión del boxeo en su calendario, tras la decisión tomada este miércoles por el Comité Olímpico Internacional (COI), aún pendiente de referendo en asamblea, de que este deporte siga formando parte del programa.

El presidente de la comisión de coordinación del Comité Olímpico Internacional (COI) para Tokio 2020, el australiano John Coates, se mostró "muy satisfecho" con la decisión de mantener el boxeo como deporte olímpico y afirmó en una rueda de prensa celebrada hoy en Tokio que los organizadores deben ahora "definir el camino".

Este martes, la Comisión Ejecutiva del COI recomendó permitir que el boxeo esté en el programa de Tokio 2020, aunque la decisión final sobre este deporte, envuelto en un conflicto entre su federación internacional y el antes citado organismo, se tomará en junio en Lausana (Suiza).

El COI dio luz verde a su inclusión en el programa olímpico pese a que las prácticas de la Asociación Internacional de Boxeo (AIBA) "siguen sin cumplir del todo la Carta Olímpica y su código ético", por lo que el organismo internacional mantiene la suspensión a la AIBA y en la práctica la excluye de organizar la competición para 2020.

Por este motivo, el COI decidió crear un grupo especial de trabajo liderado por el presidente de la Federación Internacional de Gimnasia, el japonés Morinari Watanabe, encargado de supervisar las rondas clasificatorias para 2020 y la competición olímpica.

"La decisión del COI es un buen resultado, pero hay mucho por hacer por parte de (Morinari) Watanabe y de los comités nacionales. Esperamos poder cumplir las expectativas y sueños de todos los atletas que aspiran a ser olímpicos", dijo Coates a los medios tras participar en una reunión de coordinación con la organización de Tokio 2020.

En particular, cuando resta apenas un año y dos meses para los JJOO, quedan por definir las categorías de peso y establecer los criterios para atribuir las plazas que se podrán lograr por clasificación, decisiones en las que se aplicará el principio olímpico de promover la igualdad de género, destacó el emisario del COI.

La propuesta del COI ya establece el número de atletas que competirán en este deporte en la capital japonesa, que se elevaría a 286, así como un cambio en las modalidades respecto a Río 2016: de las 10 categorías masculinas y tres femeninas que hubo en la ciudad brasileña se pasaría a ocho y cinco, respectivamente.

Por su parte, el responsable del comité especial para el boxeo del COI afirmó que tienen "muy poco tiempo" para cerrar los criterios de competición puesto que las rondas preliminares comenzarán en unos meses.

"La prioridad son los atletas. Debemos encontrar una solución para ellos", dijo Watanabe, quien afirmó que quiere "oír a los deportistas" para "poder garantizar un buen entorno de competición".

Los roces entre el COI y AIBA, que dejaron en el aire el futuro del boxeo como deporte olímpico, tienen su origen en el hecho de que el expresidente de la federación pugilística, el uzbeco Gafur Rakhimov, fuese incluido en la lista negra del Departamento del Tesoro de Estados Unidos por su presunta vinculación a mafias de la droga.

El pasado marzo Rakhimov renunció y su puesto lo ocupa de forma interina el marroquí Mohamed Moustahsane.

EFE