Colombia cayó ante Puerto Rico y se quedó con la de plata en baloncesto
El equipo nacional fue superado y perdió 91-68.
La Selección Colombia de baloncesto masculino no pudo darle la última alegría dorada al país en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018.
El combinado nacional sucumbió ante Puerto Rico al perder la final por 91-68, en el Coliseo Elías Chegwin.
Los boricuas fueron superiores de principio a fin y obtuvieron una nueva medalla de oro. Colombia, por su parte, se tuvo que conformar con la presea de plata.
No pudo ni en defensa ni en ataque
El partido empezó intenso. Colombia trató de dominar a Puerto Rico con su juego ofensivo, pero los boricuas eran efectivos con lanzamientos de tres puntos.
El encuentro fue parejo hasta los minutos finales del primer episodio. Los puertorriqueños fueron más efectivos y se fueron al descanso arriba por 20-16.
La defensa de los boricuas siguió siendo agresiva en el inicio de la segunda manga y en contragolpes aprovecharon las oportunidades y aumentaron su ventaja por 27-19.
Colombia buscaba mejorar su juego de la mano de Hansel Atencia, pero llegaría un triple furioso del puertorriqueño Eduardo González.
El público en el Coliseo Elías Chegwin alentaba al equipo nacional para buscar remontar en el marcador.
Los hinchas puertorriqueños respondían en sus asientos. La 'batalla' también se vivía en las gradas del escenario.
Su equipo siguió dominando y le sacó 16 puntos de ventaja a la selección nacional al finalizar el segundo capítulo. El marcador estaba 45-29.
En el tercer periodo Colombia salió con la sangre en el ojo. El objetivo era la remontada y el armador, Atencia, se echó el equipo al hombro.
Los locales recortaron la ventaja a 10 puntos, pero nuevamente un triple boricua extendió las acciones. La final era vibrante
El '10' colombiano apareció con su magia. Atencia se le escapó a los gigantes para anotar dos puntos cayéndose y sacar una falta. El duelo se colocaba 52-42.
Pero Puerto Rico siguió sólido en ataque. No fallaba sus lanzamientos y dejó las acciones 59-46.
La superioridad de los visitantes no paró y en el último periodo, le sacó rápidamente 17 puntos de ventaja al combinado nacional, que no reaccionaba. Mentalmente estaba hundido.
La diferencia era abismal y el juego de Puerto Rico era ratificado en cada ataque. La ventaja llegó a ser de 20 puntos.
Los visitantes se gozaron el último episodio con jugadas mágicas, más triples e incluso clavadas al aro. Sentenciaron la historia por 91-68 y fueron justos ganadores del oro.
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