Procuraduría indica que no ha garantizado un dialogo genuino con las autoridades legítimas del pueblo wayúu, ni cuenta con personal capacitado y conocedor de sus usos y costumbres.
Según José Miguel Vivanco, el proceso de adhesión puede y debe ser una oportunidad para analizar con rigor la deficiente reacción ante la crisis humanitaria que enfrentan los wayúus.
En la reunión se definió el camino para actualizar el Registro Único de Damnificados y distribuir a la mayor cantidad de familias las ayudas necesarias.
