“Las piedras no deben ser usadas para agredir sino para construir”. Bajo este slogan estudiantes de la Institución Educativa Noroccidental de Soledad narran historias de su cotidianidad, como parte de una estrategia de transformación social liderada por la docente Elvira Arciniegas.

La iniciativa nació en 2016 luego de que la profesora presenciara un triste episodio cuando algunos de sus alumnos estaban arrojándose piedras entre sí con el fin de agredirse. Ante esto, Arciniegas más allá de castigarlos quiso reformarlos utilizando el mismo objeto.

Las mismas rocas que empuñaron para cometer actos violentos, sirvieron de material para que dieran rienda suelta a su creatividad y habilidad comunicativa.

Lo que surgió como un acto de reprensión, se tornó desde hace dos años en un grupo de investigación de Ondas Colciencias denominado ‘Piedra, pincel y madera’, que ha impactado a más de mil personas involucrando a estudiantes, habitantes del sector y padres de familia de la institución educativa.

Además de reducir el índice de violencia en el barrio Las Gaviotas, lugar donde se ubica el colegio, el proyecto ha tenido tanta acogida que ha recibido invitaciones a diferentes espacios académicos para dar testimonio sobre el exitoso y innovador método educativo.

Hace unos meses estuvieron en Cartagena representando a Soledad en el Foro Regional de Ondas Colciencias donde tuvieron gran desempeño. También hicieron presencia en la reciente versión de Libraq 2019 a través del Parque Lector, donde contaron historias mediante piedras pintadas.

Próximamente representarán a Soledad en el Foro Educativo Nacional, que se realizará el 8 y 9 de octubre, en Bogotá.

Tienen visionado montar una empresa con ayuda de la comunidad, donde planean las piedras adornadas y la madera que provenga de los residuos que dejan los arroyos. Para ello, dictan capacitaciones cada sábado en las instalaciones del colegio a las personas que quieren sumarse al proyecto.

Bajo el lema “Con las piedras de siempre y aprendiendo como nunca”, la docente Elvira Arciniegas se propone que sus pupilos se desarrollen a nivel ético, ciudadano, académico y personal.

Asimismo, desea crear otras redes educativas a nivel local, regional y nacional, en aras de que implementen este modelo aplicándolo de manera eficaz.

“El hecho de que podamos asistir a otras instituciones compartir la estrategia y aplicarla es fantástico. Sería excelente que se adaptara en otros países”, señaló.

Arciniegas afirma que se debe dejar de asociar a la piedra como sinónimo de castigo, lo cual es difícil al ser un concepto de antaño, basándose en el pasaje bíblico de María Magdalena y la turba enardecida que estaba dispuesta a apedrearla.

"Si ves a un estudiante recogiendo piedra, ya no es para tirarla sino para pintarla”, concluyó con orgullo la educadora.