“Te quise con el alma, bien sabes
que amarte más no pude, volaste
con rumbo hacia las nubes, más altas
ya no pude alcanzarte.
Hoy cuando de la nube te bajas,
ya es demasiado tarde, que vaina
pues ya no queda nada, de aquel amor tan grande”.

¿Quién no ha cantado esta canción a todo pulmón,haciéndole coro a su intérprete Diomedes Díaz, recordando una decepción amorosa? Esa ruptura genera un sentimiento que mezcla rabia, dolor, tristeza, frustración y que lo llaman despecho, tusa o lipotusa.

Yina Gómez, psicóloga y escritora define la tusa como: “un estado de resistencia por el que pasa una persona cuando la relación culmina en malos términos o cuando uno de los dos no acepta el rompimiento del otro. Esa resistencia genera sufrimiento, tristeza, vacío y un sin sentido de la vida”, explica.

Los síntomas dependen de cada persona y del tipo de relación que tenían y de su capacidad de afrontar este tipo de duelo, porque en ocasiones un despecho mal manejado podría generar desde tristeza extrema, depresión, falta de apetito hasta trastornos de sueño.

Hoy #sinrecato les daremos algunas ayudas para aquellos despechados, para que no cometan estos errores en el intento por olvidar a esa persona que un día les hizo feliz. Por supuesto que depende del tipo de relación (noviazgo, matrimonio, hijos) y las circunstancias:

Efectos sexuales: De acuerdo con un estudio de la Universidad de Missouri, el 35% de las parejas que finalizan una relación de larga duración decide mantener relaciones sexuales de una forma desenfrenada, mientras que el 25 % lo hacen de manera esporádica.

Tiempo: No es bueno iniciar una relación inmediatamente. Es recomendable darse un tiempo y superar su relación.

Malas compañías: Ni el alcohol o las drogas les permitirán olvidar a esa persona, ni tampoco la hará que vuelva. 

El chantaje: No hay manera de retener a otra persona a la fuerza y menos con mentiras, como simular un embarazo, fingir una enfermedad o cualquier situación para llamar su atención.

Amistad con distancia: Esto es una manera de negación y de no cerrar la relación. Cuando una pareja termina no es conveniente ser amigos, o por lo menos no de manera inmediata.

Pasar la página: Si por alguna razón no puedes borrar su WhatsApp, es mejor no seguir sus redes sociales, porque es una tentación de ver su nueva vida y sus cambios. Si te da paz y te hace sentir mejor, hazlo!

Buenas vibras: Rodéate de todos los que te aman y te apoyan, tu familia, tus amigos y permíteles que te ayuden a superar este momento difícil.

Amor propio: Es tiempo de pensar en ti. Empieza ese curso que quieres hacer, haz el viaje que tanto quieres, ámate tanto como te lo mereces.

Ayuda profesional: Si lo anterior no es suficiente para superar ese despecho. Busca ayuda profesional de una psicóloga o un grupo de apoyo. Cuida tu salud mental.  

Fuera de control

En ocasiones, después de terminar una relación algunos despechados, guiados por el dolor y la rabia, actúan sin control con la intención de dañar a su expareja. Y utilizan esas fotos y videos que en algún momento que se hicieron. Para cuando la relación termina, se vengan, compartiendo este material en redes sociales.

“El ciberescrache es una de las muestras de la violencia social contra las mujeres, usada con el fin de denigrarlas, como un castigo o una forma de exhibirlas”, afirma Irene Friedman, secretaria del Foro de psicoanálisis y genero de la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires.

La frustración y el resentimiento son los motores de algunos despechados y aprovechan siempre para hablar mal de su pareja con las personas que su ex aprecia.

Es importante evitar que tu ex se convierta en un acosador (a), no aceptes mensajes, llamadas o visitas inesperadas. El despecho en niveles graves genera actos de violencia, es su manera de desquitarse del dolor.

Si en algún momento sientes que la situación se sale de control, no dudes en buscar ayuda, no afrontes esta situación solo y no deben tomarse a la ligera estos detalles porque se podría evitar una tragedia.

Cuando una relación termina sientes que todo está perdido pero lo más probable es que la vida te está preparando para alguien a tu medida.

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