A raíz de la pandemia, las visitas en cárceles del país han estado restringidas. Tampoco es la excepción en las cárcel de Mediana y Alta Seguridad de Valledupar. Es por ello que varios de los reclusos, a través de abogado, están solicitando que puedan volver a ver a sus familiares. 

“El problema más grande es el derecho fundamental a que sus familiares los visiten. Muy a pesar de la pandemia, tomando los protocolos de bioseguridad. Ellos necesitan ver a sus esposas, a sus madres y a sus hijos. La Dirección General del Inpec está dando una reapertura, pero con muchas restricciones. Es decir, que una mujer que vaya a ver a su esposo en la cárcel y no lo ha visto durante 10 meses debe estar a dos metros de distancia”, dijo Miguel Ángel De la Paz, abogado de varios reclusos de ‘La Tramacúa’.

De igual manera, hace un llamado a los organismos de control para verificar las precarias condiciones en las que se encuentran los reclusos.  

“En esta cárcel judicial y en La Tramacúa, donde tengo ocho procesados como cobijados míos, el problema es grave en asistencia en salud, alimentaria. Muchos guardias dentro del penal dan maltratos en contra de los procesados”, puntualizó el abogado. 

Los reclusos consideran que durante la pandemia no han generado desórdenes dentro del centro de reclusión de Valledupar, como ha pasado en otras cárceles del país, y exigen sus derechos de manera pacífica.